Hugo Spritz
Hugo Spritz: un salto en el tiempo y en el espacio….
Estamos al inicio del 900 cuando en los valles de las Dolomitas nace la costumbre, en los meses de mayo y junio, de recoger las pequeñas y candidas flores de saúco para más tarde dar vida al homónimo jarabe. Nada es dejado al azar, ni siquiera el horario en el cual estas flores perfumadas se recogen…jamás en las primeras horas de la mañana ya que las pequeñas flores aún están cerradas, ni tampoco demasiado tarde cuando ya fueron besadas demasiado tiempo por el sol. Flores de saúco…., agua, limones y azúcar, son los ingredientes que dan vida a este néctar del sabor delicioso, capaz de obtener una acción refrescante y al mismo tiempo energizante, ideal para acompañarnos a todas las edades. Elementos naturales, nacidos y criados en territorios incontaminados, mezclados con atención y dejados descansar sin prisa. El jarabe, como nos enseñaron nuestros abuelos, viene después diluido en el agua para los más pequeños y en el vino para los adultos. Pasan los años, las decadas, pero Hugo nunca pasa…. y es asi que la tradición encuentra la modernidad. Los tiempos han cambiado, los ritmos de vida también, pero nuestro enfoque hacia la calidad de los ingredientes se mantiene sin cambios. Hugo se transforma entonces en Hugo Spritz, una bebida prêt-à-porter que espera solo unos cubos de hielo, un par de hojas de menta, si se prefiere una rodaja de manzana verde y está pronto para ser disfrutado. Burbujeante, fresco y jóven es HUGO SPRITZ, el aperitivo más cool del momento!
